El propósito de tu vida
¿Cuál es el
propósito de tu vida? ¿Alguna vez lo pensaste? Nosotros nacimos para hacer
grandes cosas, Dios tiene preparado un futuro en el que Él está a nuestro lado
todos los días.
✟ Ya no vivo yo, Cristo vive en mí ✟
"He
quedado crucificado con Cristo, y ya no es mi 'Yo' el que vive, sino que es
Cristo el que vive en mí. Y esta vida mortal que actualmente vivo, la vivo por fe
en el hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí". - Gálatas 2:19-21 (en Comentario Bíblico de Matthew Henry) "Con
Cristo he sido crucificado, y ya no soy yo quien vive, sino que es Cristo quien
vive en mí. Y la vida que ahora vivo en el cuerpo, la vivo por mi fe en el hijo
de Dios, que me amó y se entregó a la muerte por mí".- Gálatas 2:19-21 (en Biblia Dios Habla Hoy - Tercera edición) Pablo se
siente crucificado, muerto, con Cristo, ¡pero vive! El hombre viejo, el
"yo" pecador, egoísta, autosuficiente, está legalmente muerto, pero
el hombre nuevo, la nueva creación (2 Co. 5:17), vive.
En la
medida en que el creyendo está muerto al pecado, en la misma medida está vivo
por la gracia. Vive en la carne, pero vive por fe. En cuanto a las apariencias
exteriores (lo que se ve), vive y muere con las mismas miserias y enfermedades
de los demás seres humanos, pero disfruta de una vida interior en Cristo, de un
manantial que brota para vida eterna (Jn. 4:14). Si yo no
vivo, yo estoy muerto. ¿Puede un muerto tener un objetivo, un propósito, puede
tener algo que alcanzar? No, porque está muerto. Mas vive Cristo en mí, Cristo
tiene un objetivo en nuestra vida, Cristo tiene un propósito en nuestra vida.
"He
quedado crucificado con Cristo, y ya no es mi 'Yo' el que vive, sino que es
Cristo el que vive en mí. Y esta vida mortal que actualmente vivo, la vivo por fe
en el hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí".
✟ ¿Cuál es el propósito de Jesús en
nosotros? ✟
"Y así
como Moisés levantó la serpiente en el desierto, así también el hijo del hombre
tiene que ser levantado, para que todo el que cree en él tenga vida eterna.
Pues Dios amó tanto al mundo, que dio a su hijo único, para que todo aquel que
cree en él no muera, sino que tenga vida eterna. Porque Dios no envió a su hijo
al mundo para condenar al mundo, sino para salvarlo por medio de él. El que
cree en el hijo de Dios no está condenado, pero el que no cree ya ha sido
condenado por no creer en el hijo único de Dios". - Juan
3:14-18 (en Biblia Dios Habla Hoy - Tercera edición) Jesús
expresa el gran objetivo que tuvo su venida a este mundo, y la dicha inmensa de
cuantos creen en él. Va a exponer en qué consiste la verdadera perdición, tanto
como la verdadera salvación y la fe mediante la cual se nos explica la obra de
la salvación llevada a cabo en la cruz del calvario; lo hace mediante una
ilustración tomada de la historia de Israel: Números 21:4-9.
Cristo vino a
salvarnos de la misma manera que a los hijos de Israel, que habían sido
mordidos por las serpientes venenosas, eran sanado y liberados de la muerte
mediante una mirada a la serpiente de bronce. La culpa del pecado es como la
mordedura de una serpiente venenosa; el poder corruptor del pecado es ese
veneno que se difunde por toda la persona del pecador.
El hijo del hombre fue
levantado como la serpiente de bronce en el desierto. Esta serpiente tenía la misma
figura que las serpientes venenosas, pero no tenía veneno. Así pasa con Jesús,
quien vino en semejanza de carne de pecado, pero sin pecado. Así como la
serpiente de bronce fue izada sobre una asta, así también Jesús fue izado en el
madero de la cruz.
Así como la serpiente, fue puesto para salvarnos. Quienes la
reciban por fe, jamás perecerán, pues tendrán vida eterna, es decir, una vida
que comienza en el momento en que uno recibe a Cristo y dura por toda la
eternidad. (en Comentario bíblico de Matthew Henry) Jesús vino
a la tierra para salvarnos, para devolvernos una relación con Dios, para que
podamos amarlo a él y verlo, para trasladar ese amor a las demás personas.
Nuestro
propósito es salvar al mundo, Dios nos llama a salvar a la gente de una
eternidad sin Dios.
Jesús tiene
que pertenecernos, su amor tiene que ser real en nosotros, ¿Cómo compartir de
Jesús y su amor si no nos pertenece?
"Y así
como Moisés levantó la serpiente en el desierto, así también el hijo del hombre
tiene que ser levantado, para que todo el que cree en él tenga vida eterna.
Pues Dios amó tanto al mundo, que dio a su hijo único, para que todo aquel que
cree en él no muera, sino que tenga vida eterna. Porque Dios no envió a su hijo
al mundo para condenar al mundo, sino para salvarlo por medio de él. El que
cree en el hijo de Dios no está condenado, pero el que no cree ya ha sido
condenado por no creer en el hijo único de Dios".
Jesús tiene
que pertenecernos, su amor tiene que ser real en nosotros, ¿Cómo compartir de
Jesús y su amor si no nos pertenece?